Un año más, en el marco de las fiestas navideñas, desde el Secretariado de Pastoral Penitenciaria de la Diócesis de Orihuela-Alicante y el CEU Universidad Cardenal Herrera de Elche, se busca de nuevo poner la atención sobre los 2.400 presos de las cárceles de la provincia de Alicante sin olvidar las necesidades de sus familias y entorno.

Por lo que, en este contexto, se pone en marcha la campaña “La prisión, pesebre de la misericordia de Dios”. Un lema que se hace coincidir con la proclamación y reciente apertura del papa Francisco del Año de la Misericordia al que la Diócesis de Orihuela-Alicante se ha sumado desde todos sus ámbitos y realidades haciendo de la “misericordia” el centro de todas las campañas y acciones. En este sentido desde Pastoral Penitenciaria se preguntan ¿Cómo poner misericordia allá donde se ha causado tanto dolor? ¿Cómo ser misericordioso con aquellos que han traspasado los límites de la convivencia humana? ¿Cómo contemplar ahí el Misterio de la Misericordia? Algo a lo que trata de contestar de este modo Mariola Ballester, directora de Pastoral Penitenciaria de la Diócesis de Orihuela-Alicante: “Ya no queda mucho, en unos días Dios nace de nuevo y vuelve a elegir como pesebre también aquellos lugares donde más nos cuesta descubrir su presencia, elige nacer también en la cárcel. Allí, lejos de las luces de la ciudad, lejos de todos y de todo, en la soledad de cada celda, en la soledad de cada corazón privado de libertad. Anunciará su nacimiento a Pedro, Ana, Luis… Ellos serán sus pastores esta vez, ellos que cumplen condena, ellos que pasan cada noche lejos de sus familias, de sus hijos, de sus seres queridos, en la periferia de nuestra ciudad”.

“La prisión para algunos es el final de un camino de vida de delito, para otros es lugar de visita de su hijo, su padre, su madre, su amigo…, para otros es lugar de encuentro con el rostro de Dios preso, pero sin duda, en cada Navidad, es pesebre de la misericordia de Dios” añade Mariola.

Se apela así a la participación y a la colaboración ciudadana para no olvidar que ayudar a los presos y a sus familias es invertir en prevención del delito, en el freno a la marginalidad y en la igualdad de oportunidades. Y es trabajar también para que los niños que ahora tienen a su padre o familiar en prisión, y que sufren la pobreza, no sean los presos del mañana.

Y es que con esta campaña se busca la implicación de toda la sociedad alicantina para conseguir medidas concretas como seguir dotando de recursos económicos a las casas de acogida gestionadas, “Pedro Arrupe” y “San Vicente de Paúl”, para la acogida de permisos penitenciarios y libertades para reclusos y exreclusos, así como la acogida de las familias que vienen a visitarlos y que no tienen posibilidades económicas. Se busca también becar a las familias de los presos para ayudas de alimentación, comedor escolar para los niños, libros de texto, pago de medicamentos y otras necesidades urgentes, más evidentes y abundantes, si cabe, en estos tiempos de crisis. Además, se quiere facilitar, a través de ayuda económica, a los internos extranjeros y españoles de las cárceles de Alicante, la comunicación telefónica con la familia. Y todo ello sin dejar de lado la mediación socio-laboral, a través del programa de inserción laboral, para que aquellos que menos opciones tienen puedan acceder a un futuro puesto de trabajo. Y en este sentido, se pretenden seguir creando los cauces para crear un servicio de mediación penal y penitenciaria que cuide a la víctima y posibilite la reconciliación social desde una cultura de la no-violencia y de la justicia restaurativa.

“En este año de la Misericordia, en esta Navidad, giremos nuestra mirada también hacia los presos y sus familias, abramos nuestro corazón y dejemos que ese Dios que pide nacer en él encuentre un lugar cálido, acogedor, que lo recibe dispuesto a poner perdón allí donde pocos lo quieren poner, un corazón dispuesto a amar a aquellos a los que pocos quieren dar amor, en definitiva, un corazón dispuesto a ser también pesebre de la misericordia de Dios” culmina la directora de Pastoral Penitenciaria.

CON EL APOYO DEL CEU:

El CEU Universidad Cardenal Herrera de Elche es la principal entidad implicada en esta campaña colaborando desde 2002 con el diseño e impresión de dípticos y carteles que sirven para dar a conocer la campaña por todos los rincones de la provincia. Además, el CEU colabora también con la Pastoral Penitenciaria en la maquetación e impresión de los ejemplares de la revista que edita: La Puerta, que sigue siendo un vehículo de comunicación para los presos sirviendo de conexión con el exterior.

¿CÓMO COLABORAR?

 

  • Por Transferencia Bancaria en Sabadell CAM

Cuenta Obispado Orihuela-Alicante:

Nº: 0081-7310-64-0001368945

Es importante indicar que es “Para Pastoral Penitenciaria”

 

  • Por Donativo en el Secretariado Diocesano de Pastoral Penitenciaria.

Obispado de Orihuela-Alicante (C/ Marco Oliver, 5, 03009, Alicante)

Teléfonos: 96 520 48 22 y 96 520 49 09

 

  • O mejor, directamente a los capellanes
  1. Joaquín Pina, C.P. Fontcalent:

96 542 72 03 / 696 29 24 92

  1. José Vicente Ferrández, Psiquiátrico Penitenciario:

637 37 61 54

  1. Manolo Llopis, C.P. Villena

687 92 78 57

  1. Jesús Melchor, C.P. Villena

648 75 85 17

  1. Hebert Ramos, C-P. Villena

619 07 88 73