UN PROYECTO DE RECOGIDA DE ALIMENTOS AYUDA A SOBREVIVIR
A 800 PERSONAS DEL BARRIO ALICANTINO DE CAROLINAS
 
La iniciativa ha sido puesta en marcha por un grupo de madres del Colegio Ángel de la Guarda en estrecha colaboración con Cáritas Parroquial y otras obras sociales
 
El próximo 15 de diciembre se hará una recogida especial para que ningún niño, de un extenso listado, se quede sin su juguete de Navidad
 
Hace nueve meses, en el Colegio Ángel de la Guarda de Alicante, se puso en marcha un proyecto que venía a sumarse a las distintas actividades que en este Centro funcionan para ayudar a los más necesitados. Este proyecto se llama “Cuenta Conmigo”y surgió por iniciativa de un grupo de madres de alumnos, e inmediatamente encontró el apoyo de la A.M.P.A y de la Dirección del Centro.
 
“Decidimos hacer algo pero sin saber muy bien por dónde empezar (comedores, parroquias, ONG´s…). Estábamos convencidas de que podríamos encontrar un proyecto que motivase a más padres del colegio, un proyecto para que, voluntariamente y cuándo se pudiese, sirviera para apoyar a otros y enseñar a nuestros hijos sobre la importancia de hacerlo” cuenta, Mar Muñoz, una de las madres coordinadoras de la iniciativa.
 
Después de algunas reuniones, decidieron que el proyecto no podía ser sólo la respuesta a la difícil situación actual, sino que debía consolidarse como una actividad habitual, sin fecha de caducidad y constituirse en un importante elemento de unión entre familias y ejemplo para la formación de los alumnos.
 
Cuando les preguntamos por el nombre del proyecto, nos explican que “Cuenta Conmigo” es la respuesta que esta comunidad educativa quiere dar a la gente cercana, de nuestro entorno, de nuestra ciudad, y que , por un motivo u otro, lo están pasando mal y necesitan sentir que no están solos. Quiere ser, también, una respuesta motivada por la Fe para mantener siempre vivo el espíritu de entrega a los demás y, junto a la ayuda material, trasmitir un mensaje de esperanza.
 
Con esta idea se dirigieron al Obispado que, tras agradecerles la iniciativa, les puso en contacto con Cáritas Diocesana, entidad que les asignó el que, de momento, es el destino final de sus aportaciones.
 
De este modo, desde Marzo de 2009, cada primer martes de mes, organizan, en unas instalaciones cedidas para tal efecto por el Colegio Ángel de la Guarda, una recogida de alimentos y material en la que se han involucrado muchos padres, familiares y la propia dirección del centro que aporta también productos alimenticios del comedor.
 
En cada ocasión se recogen cientos de productos que son almacenados, seleccionados y distribuidos por este grupo de mujeres principalmente a la parroquia San José del barrio alicantino de Carolinas, que en estos momentos tiene una demanda de ayuda creciente y muy limitadas posibilidades de auto financiarse. Tanto es así que más de 800 personas están censadas en su Cáritas Parroquial para solicitar comida con la que sobrevivir todas las semanas. Para cubrir sus necesidades desde “Cuenta Comingo” se están haciendo campañas de recolección de comida pero también otras específicas, como de carros para bebés u otros enseres, que se van coordinando directamente con las diferentes obras sociales con las que se está trabajando.
 
El Proyecto Paloma, centrado en la formación profesional de mujeres sin recursos, es una de ellas. A esta causa se aportan principalmente productos alimenticios (para las clases de cocina y las meriendas de los niños), pero también ropa para las madres y sus hijos, pañales, carros, leche específica para bebés…
 
Durante varios meses se centró además la atención en amueblar un piso en el casco antiguo de Alicante, gestionado por Cáritas y dirigido a mujeres con niños. Se consiguieron cunas, ropa de casa como cortinas, sábanas o toallas y menaje del hogar.
 
Principalmente desde “Cuenta Conmigo” se está demandando comida pero llegan también muchas otras donaciones de ropa y material infantil que están siendo derivadas a la parroquia de la Inmaculada del Pla y al Proyecto Lázaro.
 
Por otra parte, este grupo de madres está haciendo seguimiento y asistiendo casos concretos que les llegan a través del colegio. En la actualidad se está ayudando a una decena de familias todos los meses y atendiendo numerosas peticiones de ropa para bebés y niños. Un ejemplo de ello es la recogida de ropa y productos infantiles para un matrimonio en dificultades que está esperando trillizos o una joven que llevaba a su bebé con compresas del hospital porque no tenía para comprar pañales.
 
Gracias a esta iniciativa se está poniendo un granito de arena para ayudar a las muchas familias que lo están pasando mal en la ciudad de Alicante. “Durante estos meses hemos recibido mucho calor humano de todos los involucrados, desde los numerosos padres del centro que colaboran hasta el gran recibimiento del personal de Cáritas cuando entregamos los alimentos y enseres en momentos muy delicados en los que en muchas ocasiones tienen la despensa vacía y muchas familias que atender ese mismo día por la tarde”, afirma unas de las madres cooperante.
 
Tanto es la ilusión de este grupo de mujeres que, apoyadas por el AMPA y la dirección del colegio, han organizado diferentes acciones concretas para estas fechas navideñas. Desde charlas para concienciar a los niños y hacerles partícipes de la felicidad que produce ayudar a los que más lo necesitan hasta diferentes recogidas especiales.
 
En este sentido el próximo martes, 15 de diciembre, está previsto realizar un acto para reforzar la campaña de este mes y pensado principalmente para alegrar las Navidades de los niños más pobres de Alicante. Se pretende conseguir al menos un juguete para cada niño de un largo listado facilitado desde el Proyecto Paloma. Para la ocasión se va montar un pesebre en la ubicación habitual de recogida (C/ Andalucía, 22, junto al Colegio de Primaria Ángel de la Guarda), donde los chicos y chicas del centro podrán acercarse a aportar su regalo (un dibujo, una carta, un kilo de cualquier alimento o un juguete) en el horario comprendido entre las 9:00 y las 12:00 horas.
 
Según Mar Muñoz “seguro que es un acto muy emotivo porque es la primera vez que vamos a involucrar a los niños ya que hasta el momento han sido los padres los que han participado en la puesta en marcha y mantenimiento de esta iniciativa”.