El cáliz profanado de Qaraqosh estará del 1 al 4 de julio en el Monasterio del Espíritu Santo de las Carmelitas Descalzas, en la pedanía de Algorós, en Elche. La pieza estará presente en las celebraciones de la Santa Misa de las 8:30 de la mañana del jueves 1 al sábado 3 de julio y en la de las 10:00 h del domingo 4 de julio. Al finalizar la eucaristía se contará además con el testimonio de Sergio Rivas, responsable de la institución Ayuda a la Iglesia Necesitada en la zona de Levante. Además, en todas las celebraciones se rezará por los cristianos que sufren persecución.

En 2014, terroristas del Daesh desmantelaron y profanaron la iglesia de Qaraqosh, una población asiria perteneciente a la gobernación de Nínive, al norte de Irak. Entre las piezas sustraídas se hallaba este cáliz que los extremistas emplearon como diana en una llanura cercana. La población católica de la zona se vio abocada a huir al desierto. Fruto de estos hechos, aconteció algo que estaba lejos de los propósitos de los terroristas: el cáliz se convirtió en un emblema para los cristianos, un signo que recuerda que la persecución religiosa es algo muy actual y una invitación a la unión y a la oración.

El cáliz profanado de Irak fue recuperado de las llanuras de Nínive y se volvió a consagrar, dejando intacto en él la melladura e imperfecciones sufridas a causa de la bala, como testigo de esta realidad persecutoria; un tiro al blanco que provocó un orificio por el que entró el proyectil y cuya salida reventó la mitad de la copa.

La Iglesia católica siria, perteneciente a una de las 24 iglesias ‘sui iuris’, donó la pieza a la Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada, encargada ahora de acercar este cáliz a todas las diócesis del mundo. La sacra copa ha viajado ya por gran parte del mundo.