Ante el temporal que está azotando principalmente el sur de la provincia de Alicante y que, con tanta dureza, está afectando en estos momentos principalmente a Orihuela y su comarca de la Vega Baja, el obispo de la Diócesis de Orihuela-Alicante, monseñor Jesús Murgui, desea comunicar su preocupación y seguimiento de los efectos del mismo en las diversas poblaciones inundadas.

Tanto es así que, en estrecha colaboración con el ayuntamiento de Orihuela, se ha habilitado el Seminario como albergue provisional. Al mismo tiempo se están ofreciendo locales parroquiales para acoger a afectados por las riadas y lluvias en localidades como San Bartolomé, Desamparados o San Fulgencio, entre otras.

El propio obispo diocesano y el vicario general, D. Vicente Martínez, han intentado acceder a la zona este mismo mediodía, para colaborar y prestar su apoyo, no pudiendo sobrepasar la población de Benferri, debido a las dificultades en las vías de circulación.

Monseñor Murgui sigue muy pendiente del avance del temporal animando a que las parroquias y sus locales sigan siendo refugio y ayuda para todos aquellos que lo puedan necesitar en las próximas horas.