El próximo sábado a las 11:00 serán ordenados por el Obispo Diocesano, Monseñor Rafael Palmero, en la Concatedral de San Nicolás de Alicante
 
La Concatedral de San Nicolás de Alicante acogerá este sábado 4 de julio la ordenación de ocho nuevos sacerdotes, dos más que en el año 2008. El Obispo Diocesano, monseñor Rafael Palmero, presidirá el acto acompañado por más de un centenar de sacerdotes del Presbiterio Diocesano.
 
La ordenación comenzará a las 11:00 de la mañana y durará alrededor de un par de horas. Será una celebración cargada de emotividad en la que se espera una multitudinaria asistencia. Familiares, amigos y sacerdotes acudirán desde todos los puntos de la provincia para acompañar a los jóvenes diáconos en su paso definitivo hacia el sacerdocio.
 
En concreto van a ser ordenados sacerdotes Carmelo Ramón Rives, Víctor Ferrer García, Francisco Javier Colomina Campos, Estanislao Trives Sánchez, Ramón Martínez Ramón, Juan Alfaro Benítez, Santiago Estradera Gómez y Francisco Antonio Miravete Poveda.
 
Todos ellos fueron ordenados diáconos, el paso previo al sacerdocio, el pasado 4 de octubre en la Iglesia San Martín de Callosa de Segura y desde entonces llevan realizando tareas pastorales en diferentes parroquias de la Diócesis. Han sido, pues, nueve meses de preparación en los que, según afirma Francisco Javier Colomina: “he podido vivir a pie de calle, conviviendo con la gente de la parroquia, descubriendo sus alegrías y sus preocupaciones… y esto me ha hecho descubrir muchas cosas”. Por su parte, Carmelo Ramón Rives, ha destacado de esta etapa previa de diácono “cómo las personas buscan a Dios y quieren que les muestres el camino hacia él y les ayudes a encontrarse con él”. A su vez Ramón Martínez aporta: “yo he disfrutado mucho de las experiencias del día a día con la gente de la parroquia, los niños, catequistas, enfermos, el coro, las cofradías… todos me han hecho sentirme como en casa y eso es en definitiva la gran familia de la Iglesia”.  
 
Sus edades oscilan entre los 23 y los 36 años y proceden de localidades alicantinas diferentes, pero prácticamente todos ellos tienen algo en común, fueron monaguillos en sus respectivas parroquias cuando eran pequeños y afrontan esta nueva etapa con los nervios y la ilusión propia de quien ve su sueño hecho realidad.
 
Al respecto Santiago Estradera comenta: “después de cuatro años de vida profesional me surgió una inquietud que nunca antes había sentido. Resultó que el trabajo que realizaba como voluntario en diferentes ONG´s y en la parroquia de la playa de San Juan me era mucho más gratificante que lo que me reportaba mi trabajo como economista. Conocer a Jesucristo es lo más grande que me ha pasado en la vida”.
 
Y para la nueva etapa que comienzan, ahora ya sí como sacerdotes al servicio de la Diócesis de Orihuela-Alicante, son muchos los objetivos y esperanzas. Víctor Ferrer aporta “deseo darme plenamente sin miedo a perder nada”. “Espero poder seguir dando gratis lo que gratis he recibido, la fe y también la vocación sacerdotal” afirma, por su parte, Estanislao Trives. “A partir de ahora se hará realidad lo que en el seminario sólo podía soñar”, añade Francisco Antonio Miravete.
 
 
LOS PERFILES
 
El más joven de los ocho inminentes sacerdotes diocesanos es Carmelo Ramón Rives, nacido en Granja de Rocamora. Entró al seminario a la pronta edad de 11 años y ahora, con 23 años, pasará a ejercer su primera etapa como presbítero en la parroquia de Nuestra Señora de Gracia de la ciudad de Alicante. Celebrará su primera misa solemne el domingo 5 de julio a las 20:00 horas en la parroquia de su pueblo natal, Granja de Rocamora.
 
Le sigue muy de cerca Víctor Ferrer García, de 24 años de edad y natural de Formentera del Segura. Entró en el Seminario el año 1996, en el curso de 8º de EGB, cuando tenía 12 años, después de haber sido monaguillo en la parroquia de su pueblo. Ha sido destinado a la parroquia de las Santas Justa y Rufina de Orihuela. El próximo 25 de julio, a las 20:00 h, dará su primera misa en la Plaza del Ayuntamiento de Formentera.
 
Precisamente 24 años tiene también Francisco Javier Colomina Campos, de Biar. Entró en el seminario a la edad de 16 y se iniciará como sacerdote en la parroquia de Nuestra Señora del Socorro de Aspe. Al día siguiente de la ordenación presidirá su primera misa, a las 12:00 h, en el pueblo que le vio nacer, Biar, en la Parroquia Nuestra Señora de la Asunción.
 
Estanislao Trives Sánchez, de 26 años y natural de Granja de Rocamora, entró en el Seminario en el 2002. Encontró su vocación en el grupo de Pastoral Universitaria de la Universidad de Alicante del que formaba parte cuando cursaba la carrera de Filología Hispánica. Ahora, después de seis años en el Seminario, pasará a ser presbítero trabajando como formador en el Colegio Santo Domingo de Orihuela. Su pueblo, Granja de Rocamora, recibirá su primera eucaristía como sacerdote el 18 de julio, a las 20:00 h, en la Iglesia de San Pedro Apóstol.
 
Ramón Martínez Ramón dejó su barrio, Las Casicas, de San Felipe Neri, a la pronta edad de 11 años después de haber sido monaguillo en su parroquia. 17 años después recibe con gran ilusión su ordenación como sacerdote. Esta nueva etapa la vivirá en la parroquia de Nuestra Señora del Pilar, de Pilar de la Horadada.  El 12 de julio, a las 20:00 h, celebrará su primera misa en San Felipe Neri.
 
Entre los mayores, se encuentra el eldense Juan Alfaro Benítez, de 30 años de edad. Entró en el Seminario en el 2000, cuando tenía 22 años. Ejercerá como presbítero en la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de Santa Pola. Elda, su pueblo natal, y en concreto la Parroquia de San Francisco de Sales, será el lugar de su misa solemne el 12 de julio a las 11:30 h.
 
De la Playa de San Juan llega Santiago Estradera Gómez. Tras haber estudiado la carrera de Económicas y haber trabajado durante algún año en una empresa, decide entrar en el Seminario a la edad de 30 años. El próximo sábado 4 de julio será ordenado sacerdote con 36 años y será destinado a la parroquia de Nuestra Señora de Belén de Crevillente. Su primera misa tendrá lugar el 19 de julio a las 21:00 h en la Iglesia de San Pedro, de la Playa de San Juan.
 
Un caso parecido es elde Francisco Antonio Miravete Poveda, de 36 años de edad y nacido en Callosa de Segura. Entró en el Seminario en el año 2002, cuando tenía 30 años, después de haber estudiado la carrera de Ingeniería de Obras Públicas y haber trabajado durante algunos años como ingeniero. De pequeño, fue monaguillo en la parroquia de su pueblo y ha sido destinado como diácono a la parroquia de Santa Ana de Elda. Su primera misa solemne será en Callosa de Segura, en la Parroquia San Martín Obispo, el 11 de julio a las 20:00 h.