CASA VÉRITAS CELEBRA EL DÍA MUNDIAL DE LA LUCHA CONTRA EL SIDA
 
El obispo diocesano ha bendecido esta mañana las nuevas instalaciones ubicadas en el barrio de San Agustín
 
Bajo el lema “Casa Véritas; nuestra casa, vuestra casa” se ha celebrado durante toda la mañana de hoy el Día Mundial de la Lucha contra el SIDA en Casa Véritas, la única residencia para enfermos de SIDA sin recursos que existe en la Comunidad Valenciana y una de las pocas a nivel nacional.
 
Ha sido la de este año una ocasión especial ya que el obispo diocesano, D. Jesús Murgui, ha bendecido las nuevas instalaciones ubicadas en el barrio alicantino de San Agustín. Un nuevo hogar totalmente adaptado cedido por los hermanos Páules. Esta congregación de religiosos ha cedido sus instalaciones en la ciudad de Alicante para fines sociales y tras firmar un convenio con Cáritas Diocesana ha pasado a ser el nuevo hogar de las personas que ocupan las 14 plazas de este recurso, puesto en marcha y mantenido por la Iglesia de Orihuela-Alicante desde el año 2000, junto a la conselleria de Sanidad de la Comunidad Valenciana.
 
De este modo residentes, voluntarios, amigos y responsables de Cáritas y de Véritas han celebrado la jornada de hoy leyendo un manifiesto a favor de la lucha contra el SIDA y abriendo su nuevo hogar a la sociedad.
 
Estas nuevas instalaciones suponen más espacio para talleres, mejora de las instalaciones, sala de enfermería y de rehabilitación, zona de despachos para los trabajadores y sobre todo un aumento de la calidad de vida para todos sus usuarios.
 
 
 
 
 
NACIDA PARA LA ACOGIDA
Casa Véritas nació para acoger a personas portadoras del VIH que han desarrollado la enfermedad y que no tienen recursos para sobrevivir. La rehabilitación, más del 80% provienen del mundo de la droga y han adquirido patologías asociadas, la reinserción sociolaboral y el cuidado paliativo son los tres principales objetivos por los que se lucha desde Véritas.
 
Alrededor de 14 personas, entre la coordinadora-trabajadora social, la enfermera, el educador, los cuidadores y el personal de servicio (cocina y limpieza), dedican su día a día a hacer realidad este recurso socio-sanitario de la Diócesis Orihuela-Alicante. Aunque tienen prioridad los enfermos procedentes de la provincia en estos momentos hay residentes de otras zonas como Madrid o Valencia con una media de edad de 40 años. Las 14 plazas de las que dispone la Casa están completas pero sigue habiendo además lista de espera. En su mayoría vienen derivados de hospitales, Unidades de Conductas Adictivas (UCA) o centros sociales.
 
Cada uno de ellos tiene un plan de trabajo individualizado donde se tienen en cuenta elementos como el grado de enfermedad, si procede del mundo de la droga o su situación económica y familiar. Además, pueden salir de la Casa, siempre dentro de un horario, y participar de actividades comunes como alfabetización, manualidades, informática, inglés o jardinería.
 
ÚNICO RECURSO EN LA COMUNIDAD VALENCIANA
 En la Comunidad Valenciana solo existen dos recursos destinados al cuidado, protección y reinserción social de los enfermos de SIDA; la Casa Véritas y un piso semitutelado con 4 plazas donde son enviados aquellos residentes de la Casa cuando mejoran y se considera que están preparados para enfrentarse a la enfermedad y al día a día de una forma independiente. Pero el trabajo de la Casa Véritas no termina en este momento, desde ella se continúa haciendo un seguimiento a cada uno de ellos para que mantengan adecuadamente la medicación y comiencen a reengancharse a la vida cotidiana a través de la recuperación de lazos familiares o emocionales o de la obtención de un trabajo.
 
Se trata en consecuencia de trabajar para que todas estas personas superen sus adiciones, toleren bien la medicación y asuman un tratamiento médico adecuado a sus necesidades, emprendan una búsqueda activa de empleo y desarrollen o recuperen vínculos sociales o afectivos perdidos o deteriorados.
 
LA IMPORTANCIA DEL VOLUNTARIADO
Casa Véritas cuenta a día de hoy con un valioso equipo de voluntarios que se han convertido en una parte muy importante de este proyecto. Tanto es así que en la última etapa se han incorporado a los órganos de decisión de Véritas sirviendo de gran ayuda y aportando mucho esfuerzo y un gran trabajo en beneficio de todos. También se ha conseguido crear un grupo de trabajo especializado en el acompañamiento paliativo a aquellos miembros de Véritas que se encuentren en los últimos días de su vida convirtiéndose en el único recurso de este tipo que lo ofrece. “Para nosotros era algo muy importante ya que se trata de dignificar la vida de estas personas que en la mayoría de ocasiones se enfrentan al final de sus días solos y sin familia que les acompañe” explica la coordinadora Rosa Prieto.